Todos los comienzos son duros, hay que sacrificar muchas horas de sueño de diversión y de compartir con la familia. Lei hace un tiempo en un libro buenisimo (
El Poder de mantenerse enfocado), que el éxito es muy duro de alzancanzar y por eso no todo el mundo está dispuesto a sacrificarse.
Claro, el éxito es muy relativo, quizás para algunos el éxito se refiere a tener un carro de lujo y un penthouse en
La Caney (digo, si yo tuviera los cuartos lo pensaría) y para otros, como he visto en muchos casos es graduar a sus hijos no solo como profesionales, sino también como seres humanos, con etica de trabajo y responsabilidad.
A esos últimos, en los cuales creo que me encuentro yo, he tenido que luchar contra muchos tabues y muchisima gente que ya de por si me dice que como es posible que vaya a vivir de tarjetitas y esas cosas, que eso lo hace cualquiera, que eso lo hago yo,etc, etc, etc.
Tengo miles de anecdotas con clientes, muchas historias con tarjetas y se me han presentado muchísimos bloqueos hasta con mis seres más queridos y con los cuales he tenido que tener mucha fortaleza para demostrarles que si se puede, cuando se quiere y cuando se tiene una idea innovadora, diferente y auténtica.
Escribo este post, porque ya van 6 años entre ups and downs, que si si, que si no, que si esto y lo otro, he aprendido que en la vida no se puede vivir con miedos, porque Dios no nos dió un espíritu de temor, he aprendido que las cosas son más simples de lo que son, he aprendido a tener paciencia con las personas y manejarme con mucha altura y categoricamente porque yo siempre digo que a nadie se le puede hacer "mueca" porque usté no sabe donde va a estar esa persona mañana, he aprendido a defender mi cretividad y mis ideas con uñas y dientes, he aprendido algo de contabilidad, algo de mercadeo, algo de proyecciones, descubrí en algun momento que soy emprendedora (no lo sabía antes) y por último que la vida es muy pero muy corta para perder el tiempo en disparates y no tomar las desiciones que haya que tomar, matar el gallo en la funda, deshollar la vaca, cortar por lo sano o como se le quiera llamar.
Por eso hoy más que nunca que siento comprometida a llevar este "humilde proyecto" hasta lo último o hasta que Papá Dios me mande a buscar, me veo en el compromiso de que todas y todos los que trabajan en la industria dominicana de tarjetería y/o manualidades ya sea formal o informal, nos conozcamos, nos respetemos y nos apoyemos unos con otros, porque gracias a Dios el sol sale para todos y las personas tienen gustos y bolsillos diferentes, pero sobre todo me siento comprometida a seguir compartiendo con ustedes mis ideas, por donde voy, a donde quiero ir y mi forma de ver las cosas, las cuales se reflejan en mi trabajo.
Así que aquí les comparto unos marca libros de recuerdo que hice para mis compañeros de Matriz Comunicación Integrada, cuando me fui a trabajar con Iris Acosta en Impulso Relaciones Públicas en Partners Ogilvy. Para esta época me había empezado a picar el gusano de la curiosidad y empecé a experimentar con diferentes ideas y técnicas, sin saber hacia donde me llevaría todo eso. Tenía 24 años (I'm not that old!)
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Bueno, ya estamos al doblar de la esquina del día de las madres, así que ya hay que empezar romperse la cabeza en qué le vamos a regalar, personalmente siempre he visto que a las mamás le regalan muchos efectos electricos, platos, tazas y demás, los cuales casi siempre se quedan a apilados y guardados, he visto que las madres prefieren un regalo que se vea y se sienta genuino y de corazón, con un hermoso mensaje, aunque muchos para esta época aprovechan para regalarle la estufa o la nevera a su vieja que quieren tanto!
